Avanzar o retroceder?

Los años avanzan y de repente volteas sin querer y ves todo lo que dejaste atrás. Por un momento estás ahí, en tus días pasados, te sientes como en esos días y sonríes por un momento, un fugaz momento... y quisieras volver a esos días... pero no puedes.
Que días tan lejanos en los que creías que tenías problemas y ahora vez que no eran nada.

Que ganas de volver y vivir cosas que dejé pasar por miedo, ese miedo mil veces injustificado, ese miedo creado por fantasmas.

Algunas veces quisiera tener la edad de un adulto mayor, y con ella sus ideas sobre la vida; dejar de procuparme por las cosas sin un sentido real y enfocarme en lo que de verdad importa. Dejar los complejos a un lado.

Esos dolores en el alma que te hacen querer estar más dormida que despierta...

El alma reclama



Ha llegado el momento en que no se puede aplazar por mucho más tiempo las necesidades del alma que comienza a reclamar que hagas algo por ella, para que sienta realmente lo que es estar viva y feliz.

La lucha interior se hace más fuerte con el pasar de los días.
Decidirse a dar el primer paso hacia un rumbo desconocido es difícil pero necesario.